El consumo responsable de energía involucra diversas áreas de la vida en sociedad: desde el hogar con un consumo racionado, en la vida pública con implementación de servicios sustentables y sostenibles y a nivel industrial con el desarrollo de modelos de producción más amigables con el medio ambiente.
En este artículo te explicamos qué es el consumo responsable de energía y varias acciones para cuidar de ella en las diferentes áreas de mayor consumo.
¿Qué es el consumo de energía responsable?
El consumo responsable de energía es el conjunto de prácticas y hábitos orientados a ajustar el uso de la energía a las necesidades reales, hacer un uso eficiente de la misma y evitar su desperdicio.
Además, se busca hacer un cambio hacia las fuentes de energía sustentables y renovables, tanto a nivel doméstico, industrial y hasta social. Este enfoque busca satisfacer nuestras demandas energéticas actuales, y al mismo tiempo preservar los recursos naturales y garantizar el bienestar social y ambiental a largo plazo.
Consumo responsable de energía en el hogar

El uso de la energía es inevitable en las sociedades modernas, sobre todo en las grandes urbes. Sin embargo, se hace un uso desmedido de ella sin prestar atención al desgaste de los recursos naturales para crearla.
El consumo responsable de energía en el hogar son acciones sencillas pero que sin duda tendrían un gran impacto, sobre todo si se realizan por poblaciones enteras y durante grandes periodos de tiempo.
Si bien en México hay un consumo de energía mayor a nivel industrial, fomentar hábitos de un uso responsable de la energía en el hogar vale la pena. Eso sí, sin dejar de lado la importancia de presionar al gobierno y la industria por adoptar métodos de producción más sustentables.
El uso consciente de la energía lo podemos dividir en dos grandes rubros, energía eléctrica y combustibles como el gas o la gasolina. Aquí algunas recomendaciones para fomentar su cuidado.
Uso responsable de la electricidad
El consumo responsable de la energía eléctrica en el hogar recae principalmente en el uso adecuado de los electrodomésticos. En la mayoría de los casos la recomendación para favorecer el consumo de la electricidad es desconectar los aparatos que no estén en uso. Te damos algunos consejos de cómo hacer un uso más eficiente de la electricidad en tu hogar.
- Aire acondicionado. En primer lugar se recomienda mantener la temperatura entre los 24 a los 26 grados en verano. A menor nivel, consumirá más energía y te expondrá a cambios de temperatura bruscos que pueden enfermarte.
En invierno la temperatura ideal es entre 14 a 17 grados para no afrontar cambios de temperatura muy severos. Además recuerda que existen aire acondicionados con diferentes capacidades, elige el más adecuado según las dimensiones de la habitación donde se usará.
- Refrigerador. Se trata del electrodoméstico que más inquietud en su consumo genera, probablemente por sus dimensiones y su uso constante, sin embargo, su consumo es moderado frente a otros utensilios.
Se recomienda mantenerlo cerrado siempre que no se necesite tomar algo, revisar que la goma de sellado esté en buen estado para evitar que el frío se escape. Además, preferir aquellos aparatos que tengan el sello del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE).
- Lavadora. Procura echar a lavar cargas completas según las especificaciones del fabricante, utiliza modos de trabajo ecco, sobre todo cuando sean cargas de ropa menores. Utiliza la cantidad de jabón correcta para ahorrar agua y energía en el enjuague y desconecta tu aparato cuando no lo utilices.
- Calefacción eléctrica. Similar al aire acondicionado, mantén una temperatura adecuada entre 19 a 21 grados y elige el adecuado en potencia según las dimensiones donde se ocupará.
- Microondas. Utilízalo con porciones grandes de alimentos y procura taparlos para mejorar la eficiencia en calentado. Utiliza los tiempos de calentamiento marcados en el manual para evitar abrir la puerta para revisar la comida y perder calor y energía. Al igual que en los demás casos, se recomienda desconectarlo cuando no esté en uso.
- Televisiones y computadoras. Las televisiones y computadoras son aparatos eléctricos de bajo consumo sin embargo se les suele dejar prendidos durante largos periodos. En el caso de las computadoras o laptops, el consejo es apagar cuando no se ocupen, planear tus actividades para utilizarla de forma eficiente y si se deja en reposo lo mejor será dejarla desconectada.
Para los televisores, se recomienda apagarlos y desconectarlos cuando no se utilicen. Usar un multicontacto nos facilitará mucho el proceso de cortar la corriente hacia nuestro televisor.
- Plancha. Se recomienda planchar por las mañanas, cuando hay una baja demanda de energía, juntar toda la ropa a planchar antes de iniciar, no secar la ropa con la plancha y regular su temperatura según el tipo de ropa.
- Focos y lámparas. Aquí el consejo es buscar utilizar la luz solar lo más posible, la instalación de tragaluces y grandes ventanas ayudan a reducir el uso de focos y lámparas durante el día. Evita dejar prendidos luces que no utilices, cambia a focos de bajo consumo y lámparas solares para patios y jardines. Límpialos con regularidad para que mantengan su nivel de iluminación.
Existen muchos más electrodomésticos o aparatos eléctricos que podemos utilizar de forma eficiente como lavavajillas, secadoras, aspiradoras, ventiladores etc. La recomendación general en estos casos es utilizarlo hasta terminar nuestra labor para no perder energía al apagar y encender; apagarlo y desconectarlo cuando no lo ocupamos y preferir modelos con sellos de bajo consumo como el FIDE.
Por último, no podemos dejar de mencionar la importancia de ir implementando en el hogar más dispositivos sustentables como paneles solares, calentadores y hasta lámparas con celdas solares.
Uso responsable de combustibles
Los combustibles son otra enorme fuente de energía que se utilizan en las grandes ciudades y en cada hogar. Las principales fuentes de combustibles que utilizamos son el gas para la cocina y calentadores de agua y la gasolina para los diferentes vehículos que utilizamos como medios de transporte.
- Tapar las ollas y sartenes. Al cocinar tapa tus ollas o sartenes para conservar mayor cantidad de calor, esto reduce el tiempo de cocción de tus alimentos y se reduce el consumo de gas.
- Utiliza ollas de presión. Similar al punto anterior, las ollas de presión retienen el calor y la presión para acelerar el tiempo de cocción.
- Limpia los quemadores. Los quemadores sucios o bloqueados no queman el gas de manera eficiente. Limpia los quemadores regularmente para mantener una llama uniforme.
- Piezas pequeñas. Corta las verduras, carne u otros alimentos lo más pequeño que puedas sin comprometer tu receta. Los pedazos pequeños de comida se cocinan más rápido reduciendo el tiempo y el consumo de gas.
- Uso del horno. Si utilizas el horno de gas de tu estufa, hazlo con la mayor cantidad de platillos posible para utilizar su calor de manera eficiente y evita abrirlo si no es necesario.
- Ajusta la llama. Una llama que sobresale del recipiente donde cocinas quema más gas del que se utiliza. Ajusta la llama para que no sobresalga de la olla o sartén.
- Revisa fugas. Asegúrate de que no haya fugas en las conexiones de gas, además de prevenir accidentes reduces el desperdicio del combustible. Además mantén en buen estado las tuberías y las conexiones.
- Estufas solares. Evalúa la posibilidad de utilizar una estufa solar, si las condiciones de tu hogar te lo permiten.
- Duchas cortas. Si utilizas calentadores de gas, toma duchas cortas de entre 5 a 7 minutos máximo. Coloca un recipiente para acumular el agua que cae mientras se calienta.
- Calentadores solares. Prefiere el uso de calentadores de agua solares, pueden parecer costosos al inicio pero es una inversión que recuperas en menos de un año.
- Planea tus viajes. Al usar tu vehículo planea tus viajes para evitar sacar tu auto varias veces y reducir el consumo de combustible.
- Objetos pesados. Si llevas objetos muy pesados que no ocupes el auto, es mejor dejarlos, el peso extra genera mayor consumo a largo plazo.
- Presión en las llantas. Mantén las llantas de tu auto en una correcta presión, de estar muy baja se consume más gasolina.
- Mantenimiento. Realizar el servicio de mantenimiento a tu auto mejora la combustión del motor y por lo tanto hace un uso más eficiente del combustible.
Más acciones para el consumo responsable de energía

El consumo responsable de la energía no sólo implica el cuidado de la misma en el hogar, además es necesario favorecer el uso eficiente en la infraestructura pública y el cambio hacia las energías renovables.
Por ejemplo, se pueden utilizar paneles solares para alimentar el alumbrado público de las calles, semáforos, parques y hasta en edificios públicos. Instalar paneles solares en estacionamientos, edificios públicos y hasta en áreas públicas para aprovechar la energía solar.
Utilizar técnicas de eficiencia energética y energías renovables en la planeación de edificios gubernamentales y de servicios públicos. Además, modernizar las instalaciones eléctricas e hidráulicas de viejos edificios públicos para hacerlo más sostenibles.
Incentivar el uso de vehículos eléctricos o híbridos en el transporte público y promover a nivel industrial el desarrollo de más y mejores modelos de producción sustentable y regulaciones que fomenten el uso inteligente de los recursos naturales.